Abogados Alcoholemia en Ourense

En España, la alcoholemia está regulada principalmente en el Código Penal y en la Ley de Seguridad Vial. Los delitos relacionados con la conducción bajo los efectos del alcohol pueden acumular multas, pérdida de puntos del carnet, penas de prisión o trabajos en beneficio de la comunidad. A continuación se explican los delitos más comunes:

Conducir con una tasa de alcohol superior a la permitida (Artículo 379.2 del Código Penal)

Se considera delito cuando un conductor supera los 0,60 mg/l de aire espirado o 1,2 g/l de alcohol en sangre. Si la tasa es menor, puede considerarse una infracción administrativa, pero sigue conllevando sanciones. Entre las posibles penas se encuentra la multa o trabajos en beneficio de la comunidad (de 31 a 90 días), pérdida del carnet de conducir de 1 a 4 años y prisión de 3 a 6 meses (en los casos más graves).

Negarse a someterse a la prueba de alcoholemia (Artículo 383 del Código Penal)

No someterse a la prueba de alcoholemia si te lo pide un agente de tráfico se considera delito de desobediencia grave. Incluso si no estás bajo los efectos del alcohol, esto puede empeorar la situación y traer penas más severas. Entre ellas, se encuentran la prisión de 6 meses a 1 año, así como la retirada del carnet de conducir de 1 a 4 años.

Conducir bajo los efectos del alcohol causando un accidente (Artículo 380 del Código Penal)

Si, en estado de embriaguez, un conductor causa un accidente, puede ser acusado de conducción temeraria. También podrá enfrentarse a cargos por lesiones u homicidio imprudente, según el daño que haya causado. Entre ellos, se encuentran la prisión de 6 meses a 2 años, la retirada del permiso de conducir de 1 a 6 años, así como la indemnización económica a las víctimas si hay daños personales o materiales.

Homicidio imprudente por conducir ebrio (Artículo 142 del Código Penal)

Si por conducir bajo los efectos del alcohol se provoca un accidente y se causa la muerte de otra persona, el conductor se enfrentaría a un delito de homicidio por imprudencia grave, uno de los más graves relacionados con la alcoholemia. Podría hacer frente a una pena de prisión de 1 a 4 años, la retirada del carnet de conducir de 1 a 6 años, además de la indemnización a la familia de la víctima.

Lesiones imprudentes por conducir bajo los efectos del alcohol (Artículo 152 del Código Penal)

Si un conductor ebrio causa un accidente en el que alguien resulta herido con secuelas importantes, es visto como lesiones por imprudencia grave. Entre sus posibles penas, se tipifican la prisión de 3 meses a 3 años, según la seriedad de las lesiones, la retirada del carnet de conducir de 1 a 4 años, así como indemnización a la víctima por los perjuicios ocasionados.

Conducción temeraria bajo los efectos del alcohol (Artículo 380 y 381 del Código Penal)

Si la conducción en estado de embriaguez supone un grave peligro para la seguridad vial, se considera un delito más serio. Se puede imputar, por más que no haya habido un accidente, si se consigue demostrar que el acusado puso en peligro a otros conductores o peatones. Entre las penas posibles, se incluyen la prisión de 6 meses a 2 años, la retirada del carnet de conducir de 1 a 6 años, así como multas dependiendo del caso.

Conducir sin carnet en estado de embriaguez (Artículo 384 del Código Penal)

Si una persona conduce bajo los efectos del alcohol sin tener carnet de conducir (por pérdida, por no habérselo sacado nunca o porque se le ha retirado judicialmente), lidiaría contra un delito más grave. Entre las posibles penas se encuentra la prisión de 3 a 6 meses, la multa o trabajos en beneficio de la comunidad (de 31 a 90 días).